ACUARELA

Se caracterizan por el uso de colores vivos y variados, que pueden ir desde los más suaves y pastel hasta los más intensos y saturados. Se distinguen por la ausencia o la mínima presencia de líneas negras, los colores diluidos en agua aportan un aspecto fluido creando distintos juegos de tonalidades, transparencias y degradados. Los tatuajes acuarela pueden incorporar elementos como salpicaduras, manchas, gotas o pinceladas, que le aportan dinamismo y movimiento. El resultado es un tatuaje con un aspecto muy artístico, vibrante y luminoso, que parece una obra de arte sobre la piel.